Ante el desabastecimiento de la comunidad de Santana Ramos por cuenta de un derrumbe que se registró en la única vía de acceso al corregimiento, el Ejército y la Alcaldía de Puerto Rico realizaron una acción humanitaria al llevar 2.5 toneladas de alimentos a esta población.

Unas 1200 familias que se vieron afectadas por la falta de alimentos, recibieron mercado, al tiempo de que se realizó la evacuación de personas enfermas.

La actividad comenzó con la recoleción de alimentos no perecederos y la organización en mercados para cada núcleo familiar, posteriormente se programaron dos vuelos con helicópteros MI para trasladarlos.

«Contamos con el apoyo del Ejército Nacional que, con aviación de Ejército y la Décima Segunda Brigada, nos brindaron todo el respaldo porque se trata de una población rural con mucha necesidad, más cuando se tiene un bloqueo sobre la única carretera de acceso, es decir, desde Algeciras, hemos traído estos víveres pero es una solución temporal porque la comida se consume y se acaba, lo que requerimos urgente es que se reactive el acceso por tierra a la población de Santana Ramos donde hay 24 veredas», indicó el alcalde Hernán Bravo.

Por su parte el mayor Carlos Alberto Vanegas Torres confirmó que era necesaria la intervención de la fuerza pública y se hace posible a través del programa Caquetá es Pasión que encabeza el general Cesar Augusto Parra León, comandante de la Décima Segunda Brigada quien veló porque se cumplieron estos requerimientos aéreos y se solventara, al menos por un tiempo, las necesidades básicas de la población.

Por su parte los pobladores expresaron su agradecimiento por la ayuda humanitaria que les prestaron. Eduardo Camacho, líder comunal, indicó que la problemática es grande. «Es muy difícil porque no podemos ingresar alimentos por el estado de la carretera, pero también es grave que no podamos sacar nuestros productos, de esa forma estamos viéndonos muy afectados y requerimos atención del Gobierno», dijo.

Entre tanto Arenelly Molano dijo que la magnitud del derrumbe es desproporcional y que ha sido imposible removerlo, así que no les queda más que abogar por la presencia de maquinaria del Gobierno Departamental, apoyo con gasolina y solventarse con los aportes que hicieron el alcalde de Puerto Rico y el Ejército».